TÍTULO: No es lo que perece
AUTORA:
Número de páginas: 448
Año de publicación: 2016
Editorial: Libros de seda
Tim Mason es el tipo de chico capaz de dar con el mueble bar con los ojos cerrados, convertirse en candidato a un transplante de hígado o estrellar su automóvil contra una casa. En cambio, Alice Garret no es precisamente la chica que se plantee salir con el desastre de amigo de su hermano, eso para empezar.
Para Tim, enamorarse de Alice no sería lo más conveniente. Para Alice, nada podría darle más miedo que enamorarse de Tim. Sin embargo, ¿desde cuándo ha elegido Tim lo que más le conviene? Y Alice empieza a plantearse también que, quizá, hacer lo «más conveniente» puede que no sea siempre lo mejor. Lo suyo será, más que un encuentro, un encontronazo. Y cuando el pasado de Tim regrese para poner su vida patas arriba y colocarle en una situación que nunca se habría imaginado, pero que tal vez debería haber previsto… tendrá que enfrentarse al hecho de que, aunque la cosa no sea lo que parece, pilla a Alice de por medio.
RESEÑA
Total y
absolutamente enamorada de este libro. Sigue en la misma línea que “En la
puerta de al lado”. El nuevo romance me ha gustado muchísimo. Tanto me ha
gustado que me lo he leído en 2 días.
La
historia ente Tim Manson un chico de diecisiete años problemático,
alcohólico al que su padre ha echado de casa y se ha ido a vivir a casa de los
Garret, donde esta Alice, una chica de diecinueve años que se ha convertido en
la cabeza de familia. Al principio ambos tontean pero sin muchas expectativas,
ya que Alice está saliendo con Brad y Tim debe poner su vida en orden. Poco a
poco, ambos se van dando cuenta de que sienten algo el uno por el otro, pero
ninguno se atreve a dar el primer paso. Por fin parece que ambos están decididos
a mantener una relación, pero las circunstancias hacen que eso sea un poco
complicado.
En
cuanto a los personajes principales podemos encontrar a Tim, un chico de 17 años que ha elegido
la mala vida, pero que poco a poco irá saliendo del pozo. Aunque perece que ya
no tiene ninguna oportunidad de endereza
su vida, las circunstancias le harán madurar y se verá una gran transformación. Por otro
lado encontramos a Alice, una chica
de 19 años que se ve convertida en la cabeza de familia y aunque se hace la
fuerte en el fondo necesita que la ayuden a sobrellevar esta situación. Sensible cuando tiene que serlo y fría como
el hielo cuando toca. Una chica bastante común con la que te sentirás
identificada en algunas situaciones (por lo menos a mi me ha pasado).
En
cuanto a los personajes secundarios tenemos a toda la familia Garret,
una familia bastante grande y entrañable, sobre todo los hermanos pequeños con
los que te reirás bastante.
A pesar de ser la segunda parte
de “En la puerta de al lado”, en mi opinión este libro se puede leer aunque no
hayas leído el anterior. Una historia de amor diferente ya que esta vez el que
tiene que ser salvado es el chico y no la chica. También vemos los problemas
que se plantea la protagonista por iniciar una relación con alguien menor de
edad. La historia está contada por dos
voces, las de los dos protagonistas, lo cual es bastante interesante, ya que
ves el punto de vista de ambos.
Una
novela ágil de leer, muy amena y muy rápida, donde no te aburres en ningún
momento.
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